domingo, 2 de agosto de 2009

PARTIDISMO NEFASTO

El sistema, la versión mexicana del sistema se partidos políticos es hoy, más que nunca, el principal obstáculo para aproximarnos a la democracia, como se le conoce en el resto del mundo, aunque muy pocos países puedan presumir de vivirla.De cualquier manera, queda abiertamente claro que los diputados, senadores, y demás "representantes del pueblo" lo único que no hacen es representar a otros, menos a las mayorías. Se representan a sí mismos, nos imponen sus programas, proyectos, nos manipulan a su antojo y en dirección a satisfacer sus intereses, como elites dominantes.Es una especie de dictadura partidista en la que , lo que menos cuenta son los millones de mexicanos que no tienen tiempopara hacer grilla, tiempo para siquiera ponerse a averiguar si este candidato es bueno o peor que el anterior, no tienen tiempopara discutir si el PRI es mejor que el PAN o que los dos superan al PRD y ni qué decir de los minipartidos: Y no tienen tiempo para grilla porque primero está la obligación de llevarles a los hijos los satisfactores de sus necesidades básicas, sobre todo ahora que el desempleo está tirando a la calle a miles, varios miles de víctimas de esa perversa y muy bien maquillada dictadura de la partidocracia que aplasta, cada vez más, a los de abajo, decenas de millones.Los arreglos, en lo oscurito, entre los partidos son evidentes y ya no los pueden esconder. Los resultados son claros.La saturación de los medios, rebosante de mensajes aturdidores que sumados a una paranoia de emergencia sanitaria hábilmente manejada por el gobierno Federal coludido con el duopolio mediático han logrado implantar en nuestro ánimo y sentimientos, una apatía electoral, un abstencionismo muy merecido que supera el sesenta por ciento de los mexicanos.A este ritmo, para el 5 de julio serán pocas las personas que , libremente, salgan a votar, tal vez salgan a votar, pero la basura.

José Luis Bojórquez López